27 octubre 2013

Francia : de coches a cochecitos y de cochecitos al cierre


Producción de automóviles en 2012


La semana pasada cerró definitivamente una de las factorías de automóviles más emblemáticas de Francia, la de Aulnay, en las cercanías de París, del grupo PSA de Peugeot-Citroën.

Allí se fabricaron en su tiempo los Citroën DS ("déesse" : diosa), llamados aquí por su forma y potencia "tiburones". Tenían una original suspensión hidroneumática (tengo un amigo que todavía conserva uno en Atenas) y fueron el orgullo de De Gaullle  y de otros presidentes que los utilizaban siempre que podían. Incluso bajo riesgo de atentado.

Posteriormente en el país, Francia, fueron tomando fuerza y poder los ecolós-bobós y se optó hace un par de décadas por fabricar menos coches importantes y sustituirlos por coches más pequeñitos y menos "contaminantes", es decir, con menos consumo de gasolina y menos emisiones de CO2. Se aplicó por el Gobierno la política del bonus-malus, consistente en premiar con descuentos a los que comprasen birrias y con tasar con mayores precios a los que comprasen coches de los buenos, coches-coches.

Y así les ha ido. En 1995 Francia era el cuarto productor mundial en número de automóviles producidos. En el 2012 ya pasó a ser el trece. Porque para birrias, prefiero ir andando o en autobús.